martes, 15 de enero de 2008

Inglaterra - España

El siete de enero fue un día difícil. El estado anímico de Paulina y el que aquí narra no era el mejor, pensando en lo fabuloso que había sido el tiempo juntos en la isla.

Sin embargo, debía presentarme el 8 de enero en las instalaciones de la UOC que albergan el departamento de posgrado para iniciar las gestiones de mi posible nuevo trabajo.

Tomamos el subterráneo hasta Liverpool Central y de ahí el autobús que nos dejaría en el Aeropuerto Internacional de Liverpool "John Lennon" (honestamente, ¿quién diablos pensó en ese nombre para una terminal aérea?. Hasta la fecha, no recuerdo algo realmente importante que aquel cuatro ojos haya hecho por la humanidad... en fin).

Fue un largo tiempo de espera, con un café que casi no bebí. Platicamos poco y finalmente la despedida no fue muy alegre, con la promesa de vernos cuando más en dos semanas.

Yo se que suena estúpido que dos personas que se verán dos semanas después se puedan sentir tan tristes, pero es que de verdad la experiencia había sido tan intensa, romántica, abierta, sincera y natural; que costó mucho darle pausa.

El vuelo de Inglaterra a España no tuvo nada de especial. Les recomiendo que cuando deban volar de manera interna por Europa usen Ryanair. Es la equivalente a Volaris, Clic, Interjet y todas las de bajo costo. Por 20 libras volé de Liverpool a Girona.

Una vez en Girona tomé "el bus" que me deja en la estación norte de Barcelona, a donde arrivé cerca de las 11 de la noche. De ahí usé un taxi que me dejó en el que ahora es mi domicilio: Jocs Florals 45. Vivo en el tercer piso primera puerta.

Ahí ya me esperaba Daniela, una buena amiga que conocí a través del campus virtual de la UOC y que ya había hecho todas las gestiones para que pudiera alojarme en un cuarto de ese departamento que como podrán deducir comparto con ella (el departamento, no el cuarto) y con el casero, Miguel.

No hay comentarios: